Taboga y los 500 Años de Panamá

Cuando buscaba información sobre  por dónde habían llegado hasta Cabuya de Chame los mangos y tamarindos, tropecé por casualidad con la isla de Taboga  y solicitando información a mi alumno y amigo Álvaro González, hoy sociólogo además de forestal, me presto su escrito “Taboga , mas que una Isla” que me nutrió con gran información sobre su tierra natal, información  que yo no conocía en buena parte.

En ese entonces me dije que debía compartir con ustedes parte de esa información, que sigue como literatura gris y no la conocen gran parte de los panameños.

El próximo año Panamá ciudad, cumplirá 500 años de ser la primea ciudad fundada por los homo sapiens españoles en el litoral americano.  Después y solo después, celebrarán sus 500 años el resto de las capitales en sur américa.  Colombia lo celebrará 20 años después.

Pero en el caso de Panamá, cuya fundación fue en 1519, se conocía como punto importante la Isla de Taboga.  Ya en 1510 habían visitado Taboga: Pedrarias de Ávila, Pascual de Andagoya, Francisco Pizarro, Diego de Almagro, Gaspar de Espinoza y el cura Hernando de Luque, quien fundara el primer villorrio en la isla, en el año 1524.

La razón es muy simple y casi estoy seguro de que igual que yo, no habían reparado en ello. La ciudad de Panamá (Panamá Vieja), fue fundada donde había más sabanas costeras y era seguro llegar desde el Caribe, pero toda la orilla en el Pacífico la formaban manglares y marismas.  Construir un puerto seguro era costoso y además muy distante.

Una isla a poca distancia de la recién fundada ciudad, con entradas seguras, riberas firmes y mar profundo, era lo ideal para ese entonces.

Es por ello que toda la exploración y luego la conquista y además el saqueo de toda la riqueza del sur, salió y llegó primero a Taboga y luego a ciudad de Panamá.  De la misma  manera si viajaban para el resto de Panamá hacia Veraguas, salías de Taboga hasta llegar a Chame y de allí seguir por tierra hacia Azuero y Veraguas.  Taboga ha recibido en su historia a numerosos huéspedes, algunos no tan honorables, otros muy distinguidos, que marcaron su identidad.

 

1515 el Cacique París expulsa de Parita a Gonzalo de Badajoz y lo lleva hasta Chame y de allí se va a refugiar a Taboga.

1524 el cura Hernando de Luque crea el villorio San Pedro de Taboga y ese mismo año sale de Taboga Francisco Pizarro hacia Perú y Diego de Almagro hacia Chile.

Taboga fue asaltado varias veces por  piratas y corsarios. En 1671 Henry Morgan, luego otros como Hawkins,Caxon, Harris, Davis y otros. En 1685 el navegante  William Dampier fondeo sus naves en Taboga,.

Entre 1841 y 1870 Taboga era el puerto oficial de la ciudad de Panamá y pasó de tener 1568 habitantes en 1870 a contar con 3130 habitantes en 1892.

Los datos históricos se acumulan por montones.  Lo mejor sería que cada uno investigara un poco sobre nuestra famosa, pero humilde Isla de las Flores y verán que con sus altas y bajas, siempre ha estado al lado de la altiva ciudad de Panamá.

Esta isla ha sido puerto, centro de acopio, lugar de cuarentena, hospital, campo de concentración, botín de conflictos, pero también lugar turístico, tesoro de pescadores, refugio de artistas como Roberto Lewis y el famoso paul gauguin , escritores extranjeros y nacionales, cuna del insigne poeta y escritor nacional Rogelio Sinán seguidor de la corriente modernista  iniciada por Rubén Dario.

Yo hago votos porque el proceso de descentralización que recién empieza, se siga profundizando y los gobiernos locales se convenzan de que invertir en educación y cultura, fortalece la identidad de los pueblos y los hace crecer.  Que la cultura de “guaro y campana” que parece envolver a todos los municipios del país, lo único que producen es clientelismo barato y alienación de la juventud local con todos los vicios que eso arrastra.Ojalá que conjuntamente con los 500 años de la ciudad de Panamá le reconozcamos a Taboga, todo el servicio, apoyo y solidaridad ofrecida en todo este tiempo.

Que los tamarindos de Taboga vuelvan a florecer y a alegrar, no solo un salón de  la Presidencia de la república, sino el futuro de sus habitantes.

Homo sapiens. Parte 3

Volviendo al punto donde empezamos, les recuerdo que la dominación de Homo sapiens fue debido principalmente a su ingenio, imaginación y su capacidad de “chismorreo” y crear ilusiones en la colectividad, para visualizar el futuro casi como si fuese una realidad virtual; pero estos patrones en la tercera ola se están viendo cuestionadas hasta en sus raíces.
Las sociedades de la segunda ola utilizaron como método de gobierno diferentes sistemas, desde las tribales, monárquicos, hasta llegar a las democracias y se accedía a ellos por la vía de los partidos políticos que no son otra cosa que grupos de homo sapiens que compartían iguales criterios e ideas sobre la mejor manera de cogobernar o convivir en sociedad.
La ideología es la fuerza que une a un partido, sea cual fuere, pero el desgaste , los vicios (corrupción, clientelismo, etc.) y las diversas formas, tanto de relaciones comerciales, así como las diversas formas familiares, hacen que hoy día todos los partidos tradiciones en el mundo entero, estén cuestionados por sus propios miembros. Y las leyes que los rigen, como también las que rigen a los estados, estén sometidas al escrutinio público para actualizarlas a las exigencias de la nueva sociedad. Debo reiterar, que estos cambios no necesariamente serán pacíficos.
La ingeniería genética, la robótica y la química y física cuántica, cada día exploran áreas del conocimiento no conocido por los humanos y se está llegando a resultados que el mismo humano no ha definido aún.
Hoy día es posible tener los hijos por pedido y encontrará empresas que le venden espermas u óvulos, según el deseo del cliente y de paso, le eliminan alguna imperfección en el ADN, para evitar alguna enfermedad hereditaria. La clonación no fue solo un experimento con una oveja; ya se clonan células madres para producir órganos humanos. Es tanto lo que ha avanzado la genética, que se pueden producir hipotéticamente, seres con ADN modificado para lo que su fabricante desee. Esto se conoce como el experimento Frankenstein.
Todos los seres vivos creados por la naturaleza, han sufrido cambios profundos para llegar a donde estamos incluyendo el hombre; y esto se llama evolución y hay normas naturales que la rigen y sobre todo que la equilibra (a las buenas o a las no tan buenas).Pero un ser creado por el hombre y que incluya un genoma alterado o diferente y que pueda reproducirse cómo se llamaría? Y dónde estará el equilibrio? Se llamará Homo deus? Un hombre dios? Pareciera ciencia ficción, pero estamos muy cerca de este punto.
El tercer y último aspecto que se verá cuestionado, serán las religiones y su concepción dogmática, recordemos que entre las cosas que cohesionó a los sapiens y las permitió crear manadas más grandes y dominar sin utilizar fuerza, fueron las religiones y que posteriormente se impusieron las monoteístas. Sus ordenanzas y sus historias tenían explicación para casi todos los fenómenos que los sapiens encontraban en sus relaciones, pero hoy día todas las creencias están pasando por un proceso de cuestionamiento, debido a que en los dogmas, ya no encuentran respuestas a algunas de las creaciones de los propios sapiens, llegando a perder credibilidad y feligreses por un lado o a flexibilizar sus inamovibles normas.
Procesos como la inteligencia artificial, fecundación in vitro, criogenia, clonación y muchos otros procesos novedosos, no están contenidos en los dogmas hasta ahora conocidos y librar una cruzada o guerra santa contra el resto del mundo, suena casi improbable.
Hay otras corrientes que sostienen que Europa volverá a ser musulmana, pero no por las guerras, sino porque su población, cada día es menor y no tiene capacidad de regeneración y culpan de ello a políticas como la ideología de género, liberación femenina y matrimonio igualitario, cosas que no tienen los musulmanes, cuya población aumenta geométricamente y emigran poco a poco hacia Europa.
Según el libro de Dan Brown, los computadores dominarán, al punto de descubrir el futuro de la raza humana y al reunir a las 4 religiones monoteístas y revelarles el secreto, empieza una cacería entre ellos, para que el secreto no sea divulgado y que da origen a una apasionante trama de ciencia, electrónica, religión e intriga.
Seguro estoy de que yo no veré el futuro del Homo sapiens, Homo deus o como quiera que se llame, pero que su Tercera Ola ya empezó a formarse, casi que estamos seguros, nos guste o no.

Homo sapiens 2

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Los Homo sapiens en la Historia

Desde hace ya algún tiempo me da vueltas en la cabeza un tema que ansiaba compartir con ustedes, pero que en realidad no sabía cómo ordenarlo por la complejidad del mismo.

No sé si mi capacidad de síntesis sea tan buena, pero haré lo posible porque lo sea, sino tendrán que ser dos artículos.  El tema “La historia y futuro de la Humanidad”, pero visto desde tres enfoques distintos por 3 autores, todos famosos en su campo, pero diferentes en sus planteamientos.

Alvin Toffler fue un futurólogo, político, incubado en los países socialistas, pero que termina viviendo y trabajando en los E.E.U.U. y haciendo pronósticos socioeconómicos para grandes empresas.

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¡Pudo ser cierto! Pero…

 

Hay autores que por algún motivo, por lo general de carácter subjetivo o no lees o evitas leer; eso me ocurre a mí con el premio Nobel Vargas Llosa.  Resulta ser, que en esos largos viajes para ir a Rusia y el estar sentado por horas interminables, la lectura es la actividad mas idónea y casi por casualidad se leyeron un libro de este señor y ahora me lo recomendaron como distracción y recordéis de un pasado no tan lejano de nuestra América.

Se trata de “La Fiesta del Chivo”, novela que trata sobre los últimos días de la sanguinaria dictadura de Rafael Leónidas Trujillo en República Dominicana (1961) y menciona o narra cual fue la suerte de los descendientes o los cachorros de la bestia después de su muerte.

Tenía dos hijos varones, uno llamado Ramfis que era una especie de gigolo con dinero, que podía gastar a su gusto y murió en España en un accidente automovilístico en su propio carro.  El otro llamado Radhamés, que lo pintaban como un personaje gris con poco cerebro, sin ambiciones, cuya única aspiración era divertirse en fiestas y mujerear.  Ese se vino a vivir a Panamá en el más completo anonimato “según la novela”

Si bien las novelas pueden ser, todas, gran parte o en alguna medida parte del imaginario del autor, mucho de lo narrado es veraz y este señor vivió en Panamá.  Lo que yo no sé es si de manera anónima e insignificante como se cuenta en la novela.

Se cuenta también que un buen día desapareció y no se supo más de él, hasta que de Colombia se dice que los “traquetos” lo habían ajusticiado por ajuste de cuentas y se conoció entonces que estaba involucrado en líos de droga y lavado de dinero.  Como otra versión muy tenue como para cerrar el punto, se mencionó y también lo dice la novela, que otra versión decía que el hijo del “Benefactor y padre de la Patria Nueva” como se hacía llamar Trujillo, trabajaba para la CIA y por sus servicios le habían cambiado la identidad y se había realizado una cirugía en la cara.

Lo cierto es que el señor nunca más apareció ni vivo ni muerto y el tiempo y la memoria se lo fue tragando hasta borrarlo incluso del imaginario de sus connacionales, aunque hoy me asaltan muchas dudas y me coloca frente  a unos recuerdos que tenía casi perdidos y hoy comparto con ustedes.

Un poco más de una década después de esa época, yo ya era un profesional y conocí a un personaje con una profesión afín. Era  un gran profesional muy crítico, analítico en todo.  Disentíamos mucho pero siempre con una base científica, lo que hacía interesante toda discusión.  Políticamente teníamos ideas encontradas y era la causa de muchas discrepancias, pero fue la causa también de ir forjando una gran amistad.

 

Un día cualquiera que conversábamos me pidió que lo escuchara, que estaba muy preocupado y necesitaba hablar conmigo y esta fue su historia: El y su hermano tenían doble nacionalidad y latino al fin, le tocaba ir al frente en el conflicto armado de entonces; Vietnam, el hermano fue y a él le tocó otro trabajo, trabajar para la “compañía”.  El tiempo pasó y cada quien trató de cumplir su misión; el hermano lo tomaron prisionero, estuvo preso dos años hasta que fue rescatado y devuelto a casa.  A un hospital psiquiátrico militar con severos problemas de adicción y paranoia.  Pasado un tiempo se lo entregaron para que lo cuidara en su casa mejor que en un hospital.  Para él, esto fue un infierno, ya que lo tenía que tener sedado la mayor parte del tiempo y conseguirle droga para evitarle las crisis y además amarrarlo todas las noches porque se le escapaba para cazar ratas y comerlas crudas.

Que tu leas este relato es una cosa, pero que te lo cuente el afectado, es algo muy distinto.

Al ver que para él le era totalmente imposible lidiar un enfermo de esta naturaleza, no le quedó de otra que pedir que se lo internaran en un hospital especializado, con personal idóneo para atender estos casos que dicho sea, eran numerosos; pidió además su baja en donde cumplía misiones y se regresó a Panamá para formar una familia y vivir una nueva vida.  Hasta aquí todo bien.

El problema retorna porque después de dos años aquí y con una familia formada, recibe la visita de sus antiguos jefes y le informan que debe cumplir con una nueva misión y eso a mi amigo le dejo totalmente consternado.

Los día fueron pasando y a estos siguieron los meses y mi amigo se perdió y no supe más de él, hasta que año y medio después me informaron que había muerto de un infarto prematuro por allá en una isla de las Antillas, donde se había ido a radicar.

Se cerró un expediente y quien se acuerda de él ya?  Es solo un detalle en el enmarañado laberinto de nuestras vidas y un final quizás de la vida que le tocó vivir, igual que a Radhamés Trujillo, sin saber a ciencia cierto si murió o no, o dónde quedaron sus restos.

 “Cuando hallamos cruzado, tu y yo el negro velo.

El mundo impasible continuara girando.

Y tu vuelta y venida, le dará tal recelo…

Como al mar si arrojaras, un guijarro del suelo.

Omar Kayan.

Como Manada de Primates

 

Ya desde el año pasado les  había anunciado que desde que llegué a la edad de medio siglo, cada cinco o cada 10 años, trato de realizar una aventura extrema, para probarme yo mismo y saber que aún estoy vivo.  Luego de empezar esta aventura de compartir con ustedes mis vivencias, cumplo con mayor énfasis este auto compromiso y espero mantenerlo hasta que mi aventura “extrema” sea la de caminar 10 metros lineales sin ayuda y poder contárselo o compartirlo con ustedes.

Ya saben que estoy en los ¾ de siglo y decidí  con mi hijo que es mi cómplice de aventuras, ir a Boquete tree-treck y realizar el tour de canopy; lo que yo nunca supe era de cuántos cables se trataba y de qué largo serían esos cables.

Cuando llegamos allá, me entero de que se trata del canopy más largo de Panamá y está compuesto de 11 plataformas construidas en árboles gigantescos y nada más y nada menos que 12 cables.

Bueno, como estuvo el recorrido?  Excitante desde luego; que las piernas me temblaban y en el primer “aventón” la adrenalina se desborda como también se desbordan los estatolitos, pero cuando llegas a la estación ya empiezas a disfrutar realmente de la aventura y empecé a apreciar el paisaje y a verme dentro de ese majestuoso entorno más allá del verde de diferentes tonalidades  y cruzar por los aires, el río una y otra vez, hasta llegar a la estación 7 y descansar con el grupo para luego partir a las 5 restantes, Mientras esperaba al resto del grupo se me afloraron los genes de primate y me veía como parte de una manada de lémures correteando en el bosque.

seguro de vida

Aunque somos Homo sapiens, seguimos siendo primates aunque no tengamos rabo y caminemos erguidos, pero algo nos une y nos movilizamos en comunidad, aunque por motivos diferentes y es ese motivo diferente lo que nos permitió surgir y poblar la tierra aunque aún conservamos ADN de los otros homínidos y otros géneros como los orangutanes y los lémures.

Le has visto la mano a un mono tití? Y utilizan el dedo pulgar casi igual que nosotros los sapiens.

Bueno, dejamos la biología y la genética para otro día, que hoy el tema son mis tres cuarto de siglo o lo que es mejor, mis bodas de diamante con la maestra vida y mi aventura extrema para celebrarla.

Qué haré el otro año si todavía estoy por acá? No quiero pensarlo aún.  De pronto conducir en la metrópoli y sortear los huecos en la calle y soportar los tranques, ya es una aventura extrema y todo indica que se pondrá peor.

Para finalizar les digo que la aventura del canopy es sencillamente excitante, vayan y derramen un poco de adrenalina, a mí por lo menos, como dijo Facundo Cabral; “ nada dejé ni he perdido lo traje todo conmigo”, así que no creo que deba ir a buscar nada arriba de esos árboles.  Mi etapa de primate la doy como prueba superada.  

  Como todo un Pachuco

  

Hace ya unos fines de semana recibía desde Antioquia un whatsapp para actualizarme sobre el estado de la crisis por la que atraviesa una represa en construcción en esa parte del país.

Al despedirse el amigo me dice: “que la sigas pasando bien bajo un frondoso árbol de mango, pero no los de tu finca, ya que esos solo producen frutas.  Me refiero al público, ya que ese aparte de frutas, produce historias que tú compartes con nosotros”.

Mi amigo Chepe estaba en lo cierto, ya que unas horas después crucé y me senté a tomar un poco de fresco y a los pocos minutos se acercó a los dos que nos encontrábamos sentados, mi primo hermano Pascual y nos saludó alegremente.  No pude menos que asombrarme al ver la estampa del recién llegado.  Era todo un “pachuco”.

Vestía pantalón blanco con basta angosta y doblada; camisa negra con adornos coloridos en el frente; sombrero tipo Panamá y sus zapatos “black and white” con puntitos blancos; solo le faltaba la leontina.  Parecía salido de una foto del grupo cubano” Buena Vista Social Club”.

¡Pascualito! Le dije, está usted que es todo un Pachuco, hasta los zapatos.  Sí, contesto.  Es que ayer cumplí 90 años y me puse estos zapatos porque los tenía guardados y hoy cumplen 50 años de que los compré a plazos y me costaron caro.  Los compré en B/.35.00.  Ya les dije a mis hijos que quiero que me entierren con esta ropa.  Sabes que la última vez que los llevé a limpiar al parque Santa Ana me cobraban B/.5.00. y no los he vuelto a limpiar como se debe.

Bueno, le dije, si deseas lustrarlos como se debe, ahora no se si exista alguno que sepa y quiera lustrarlos, pero de seguro que te cobrará mucho más de B/.5.00ya que ese trabajito es para un artista.

El tiempo transcurrió entre felicitaciones y anécdotas y luego cada uno nos dirigimos a nuestras respectivas casas y yo me fui recordando la sugerencia de mi amigo Chepe y su opinión sobre la producción del  “palo de mango”.

Que edificantes es alternar con personas que como Pascual, enfrentan la vida con una sonrisa y a estas alturas vivan el día a día alegres y tranquilos.  Lo veo pasar frente a mi casa todos los días que allí estoy, con sus cuatro perros a sentarse y charlar con el que esté y me digo, ya va Pascualito de casería, a cazar anécdotas y atajar recuerdos, cuando no; lleva su guitarra “la paraguaya” para cantarle en el cumpleaños de alguno de sus amigos.

Siempre de buen talante; con su cabellera al viento de Cabuya, ese que hasta hace poco era todavía negro aún a sus 80  y tantos años, pero que ahora es amarillo, producto del tratamiento que lleva, pero que igual que él, ni se cae, ni se pone blanco; se mantiene firme y de pie como el árbol de mango.

Primo, consérvate así, alegre; “jodío y jodiendo” como decía Lole.

Esta anécdota lo quería pegar con un cuento corto que tengo escrito y forma parte de un libro que algún día terminaré.  El cuento es mas bien una anécdota que me contaron y que involucra a Pascualito, pero se haría muy largo este artículo.

Prometo compartirlo próximamente, mientras tanto, Felicidades primo, no siempre se cumplen 90 años y pueden vestirse de pachuco.

POR Dónde llegaron los Mango

 

Cuando compartí con ustedes los comentarios sobre el mango, apenas empezaban a madurar los mangos “calidad” en Cabuya.  Yo les vi racimos de frutas, pero nunca pensé que internamente los frondosos y legendarios árboles esconderían tantos frutos; y a partir del mes de abril, conjuntamente con una profusa floración, se da inicio a una parición superlativa en cada árbol y ya estamos a mediados de mayo y todavía el suelo amanece amarillo de mangos maduros y como recién ahora empiezan las lluvias en Cabuya, todas las frutas están sanas, no así con la segunda parición que vendrá en pleno invierno.

En varias ocasiones les he comentado sobre mi curiosidad por cómo llegaron los mangos a ese pueblo y sobre todo, que los más viejos son los conocidos como “calidad” y que cuando Victoriano Lorenzo llegaba a Cabuya, ya los árboles eran grandes y daban mucha sombra.  Luego me llamó también la atención, que también los árboles de Tamarindo son muy longevos.  El que está en mi casa le hemos calculado casi 200 años.

Me di a la tarea de preguntar a todos los más viejos, no solo en Cabuya sino en el distrito y fue así que entre uno y otro llegué a conversar con la maestra Dora de Gálvez, que tiene 92 años de edad y laboró en Bejuco toda su vida.

Me cuenta, ya que tiene su mente muy lúcida, que ella preguntó por los tamarindos, ya que en Bejuco existen muchos árboles y era muy común los dulces artesanales para mandarlos a Panamá y la respuesta fue: la semilla la trajeron de Taboga y es probable que el mango también.

Me vino a la memoria que en la Presidencia de la República está el Salón de los Tamarindos, por la pintura de Roberto Lewis “Los Tamarindos de Taboga”. 

Mi curiosidad aumentó, pero ahora ya me preguntaba por qué Taboga y me di a la tarea de buscar un poco sobre “La Isla Mágica” y que mejor que consultar a un tabogano.

Me dirigí adonde mi amigo y alumno el hoy Lic. Alvaro González, quien de una vez me envió un escrito recopilado por él, con historia, anécdotas, costumbres y gastronomía de su querida isla.

Desde esta líneas deseo agradecer muchísimo a Alvaro, por prestarme tan importante compendio y confieso que era totalmente ignorante de todo el acervo histórico y culturas que tiene esa pequeña isla.  Cómo es posible que nuestra educación invisibilice tanto nuestro pasado histórico?  Debo confesar que yo ( y muchos otros como yo) conocía más de la isla de Coiba que de Taboga.

El primer español que llego a Taboga fue Vasco nuñez de Balboa;La conquista del Perú salió desde Panamá, pero no del litoral, salió desde Taboga y todo lo que llegaba del Perú, llegaba a Taboga para luego trasegarlo al Caribe.  Posteriormente la ruta marítima para llegar a Veraguas, salía de Taboga y saben dónde quedaba el primer puerto? En Bejuco.  Esta ruta se incrementó luego con la fiebre del oro y con el ferrocarril transístmico y desde luego que era lógico que migrantes que salían de Taboga, llegaran a Bejuco para seguir por tierra hacia la provincia de Veraguas y así llegaron no solo los tamarindos sino los mangos.

Casi siempre mis artículos me obligan a repasar o buscar algunos datos, pero en este caso siguiéndole el rastro a los mangos, he conocido parte de la historia de mi país, que yo desconocía.

Volviendo a los mangos, a raíz del artículo, mi amigo Chepe me envió de Colombia una publicación técnica donde registran por zona ecológica y geográfica, todas las variedades de mango que hasta ese momento el país tenía.  En total, llegarían a unas 40 aproximadamente.  Yo les conté que hace 5 años, solo en Cabuya conté 30, pero si usted le pregunta al MIDA o a la Facultad de Ciencias Agronómicas, no tiene ni idea.

Les recomiendo que revisen la historia de Taboga y quedarán fascinados como quede yo.

Un tanto igual debe ocurrir con la historia del distrito de Chame.  Yo siento que cada día se desdibuja la identidad cultural del distrito y también es un distrito con mucha historia atomizada, quizás en pequeños escritos de mucha gente, pero que forma parte de la llamada literatura gris.

Por lo pronto, agradezco conocer la historia de Taboga y contar con una versión creíble de donde llegaron los tamarindos y mangos calidad al distrito de Chame.

 

Sabías que:

También conocí de boca de un morador, por qué Coloncito lleva ese nombre.  Se los cuento en otro escrito.

Un Campo de Concentración en Chame

 

Hace algunas semanas ya, cuando escribía sobre los mangos y su posible ruta de llegada a Cabuya, conversaba bajo el frondoso árbol de mango y lugar de tertulia sobre diferentes temas, salió a relucir el nombre de “La Cabaña”, que era una gran casa de madera y piedras que se localizaba en toda la carretera interamericana, en lo que hoy es la comunidad de Coloncito.

Cuando mencionaron el nombre “La Cabaña”, me dirigí a los más viejos de los asistentes y les pregunte: saben ustedes qué había allí en esa casa?  Todos, absolutamente todos, contestaron que no.

El que más conocía dijo: eso lo tenían los gringos, pero allí nadie entraba, ni se veía qué había adentro, yo sé que labraban unas piedras muy bonitas, pero no sé más.

Sabían ustedes que allí funcionaba un campo de concentración durante la Segunda Guerra Mundial? Y nadie sabía nada, incluso los menos viejos escucharon en forma un tanto incrédula lo que les decía.

Yo me pregunto: Cómo puede ser que este y otros acontecimientos que atañen a tu distrito en el que naciste y vives y que forman parte de la historia nacional, simplemente se desconozca totalmente?

Me alegró mucho el relato histórico que salió en tele Sur, a raíz del aniversario del fusilamiento de Victoriano Lorenzo; otra parte de nuestra historia que la mayoría desconocemos.

Recordemos que en 1939 empezó la Segunda Guerra Mundial, pero en 1941 se da el ataque de Pearl Harbor (Hawai) por parte de los japoneses, provocando la entrada de Estados Unidos al conflicto.  En consecuencia Panamá como “aliada” de Estados Unidos le declara la guerra a Alemania y a Italia (en defensa del Canal).  Aparte debe ceder a la Nación del norte más de 100 sitios de control (bases) además de las que ya existían en el área canalera.

Entre esas existía una base aérea en (Chame  Field) cuyo mando estaba localizado en la casona conocida como “La Cabaña”.

Estados Unidos además, establecía varias de estas bases como “Centros de Reubicación” para todos los ciudadanos japoneses, alemanes e italianos que residían en el país o eran traídos de otros países de américa, ya que conminó a todos los países a enviar a los nacionales de esos tres países y sus descendientes sobre todo japoneses, para después de su registro embarcarlos a Estados Unidos y luego a sus respectivos países de origen (Chile, Argentina, Paraguay fueron los únicos que no lo hicieron).

  La Cabaña era uno de estos sitios y cumplió esta función de campo de concentración, pese a la negativa de Estados Unidos, de llamarla así ya que para ellos eran Centros de Reubicación y asi fue  hasta 1947, que gracias a la combativa lucha de la Federación de Estudiantes de Panamá y del Frente Patriótico, se logró poner fin al uso generalizado de casi todo el territorio para fines militares estadounidense.

De los campos de concentración casi no se habló nunca y siempre lo que se comentaba estaba adornado de leyenda urbana de japoneses que estaban tomando fotos con cámaras ocultas en los botones de los abrigos, etc etc.

Yo me enteré de La Cabaña porque cuando me estaba graduando, ya solo tenía la tesis, asi que me matriculé para aprender italiano y el profesor nos contó que  estuvo concentrado en La Cabaña y de los despojos que sufrieron algunos japoneses que tenían tantos años de vivir en América, que ni siquiera hablaban o conocían el japonés. Perdieron sus propiedades, cuentas bancarias, trabajos.  Solo podían llevar una maleta.

No fue sino hasta el año 1988 que Estados Unidos aceptó ofrecer disculpas públicas por lo ocurrido, pero que “bueno, lo pasado, pasado”.

Volviendo a nuestro patio de Chame, este es un distrito con una gran importancia, no solo ecológica, sino histórica, pero tan atomizada que la erosión histórica viene afectando la identidad cultural del distrito.

Es que con la  cultura de “guaro y campana” que predomina, no solo en el distrito sino el país, hablar de historia está fuera de ritmo.

Yo tengo un documento (no quiero llamarlo libro) titulado Chame, Joya Ecológica de Panamá Oeste y lo presenté al Municipio para ver la posibilidad de publicarlo y la respuesta me recordó a la famosa frase de Charles de Gaulle. C´est tres Jolie, mais ce n´est  pas la guerre., (es muy bonito, pero no es la guerra).

Por lo pronto para los que lean este artículo y sobre todo si es chamero, ya conocerá que en Coloncito existió un campo de concentración durante la segunda guerra mundial, que nos guste o no, es parte de este distrito y de este país y tenemos el derecho y el deber de conocerla. Esto nos ayudara a contestar las tres grandes preguntas que conforman la identidad de los pueblos. De dónde venimos, donde estamos y hacia dónde vamos.

Los Dos Darién

 

En varias ocasiones les he manifestado el gran aprecio que siento por la provincia de Darién.  Mucho de lo poco que sé de silvicultura, se lo debo a ella y a su gente; y mucho de los buenos momentos que me ha brindado mi profesión los viví en Darién.  Hoy día ese placer lo sigo experimentando a través de mi hija, quien con su esposo poseen y administran plantaciones forestales en Panamá y Darién, desde hace 10 años.

La fecha fue motivo para celebrar con los colaboradores y la comunidad dicho acontecimiento, con un programa de eventos, al que fui invitado.

Mirando todos los asistentes sobre todo los trabajadores de la empresa, me llamó la atención algo muy peculiar.  No habían afrodarienitas entre los trabajadores y corroboré lo que un día me dijeron en Yaviza; existen dos Darién.

El primero: el Darién profundo de bosque espeso, ríos caudalosos, con piel oscura y olor a marisma.

El segundo: el Darién reseco, con carretera, centros comerciales y migraciones, de color castaño con pelo lacio; con olor a estiércol , arroz maduro Y madera sembrada.

Es un Darién que lo dividió el desarrollo tecnológico y una actividad económica como la forestal, que en el primer Darién ya toca a su fin, ya que como toda actividad de minería tiene una principio y un final y aquí se practicó la minería del bosque y como minería deja tras de si, un desastre ambiental rodeado de desastres ecológicos y  pobreza.

Esta era la actividad que desarrollaban casi que exclusivamente los afrodarienitas y casi desde niños, adoptaban como enseñanza y como objetivo, doblegar la naturaleza y arrancarle de las entrañas la madera que produjera dinero en el mercado de Panamá, aún a costa de la misma naturaleza.

Según estudios de la FAO, con la invención de la motosierra, la depredación del bosque tropical se aumentó 20 veces más y el Darién no fue la excepción y se fue acabando. 

La masa de obreros taladores que otrora llenaban las cantinas de Yaviza y La Palma en tiempo de corta en verano, se fueron alejando y no han sido capaces de insertarse en la nueva actividad forestal que sobrevino a la ganadería, que ocupó las tierras saqueadas y abandonadas por la minería de bosque.

El otro Darién es el de las migraciones; el que fue creciendo con la ganadería extensiva que llegó a ocupar igual que Colón, el segundo lugar en cantidad de ganado en el país, pero que era otra actividad que también afectaba el medio ambiente y después de su clímax, empezó a decrecer y encarecerse, haciendo más costosa su sustentabilidad y de 25 años para acá, inicia una nueva actividad forestal.  La silvicultura de plantaciones.

A diferencia del primer Darién, esta actividad requería de grandes inversiones iniciales para sembrar, cultivar y a los 25 años empezar a cortar; fue necesario conseguir inversiones y gestionar una Ley de incentivos.  Al cumplirse 25 años, Panamá ya exportó 5,000 contenedores de madera y apenas empieza.  Volviendo a nuestro tema, fue la tecnología la que hizo posible esta diferencia y en este día de campo quedó demostrado.

Durante el evento se realizó un concurso de derriba de árboles y una vez más, quedó en evidencia la diferencia entre los dos Darién.  Mientras en el primero el árbol en el bosque natural se “tiraba a la maldita sea” en el segundo, el motosierrista es capacitado por un profesional idóneo y armado de equipos y atuendo adecuado; era necesario cumplir con 5 variables controlables por el operador y otra no controlable, pero observable, como lo era el viento.

Para no alargar el cuento, la mayoría de los concursantes eran indígenas de la etnia ngobe, el resto era azuerense.

El ganador con mayor puntaje quedó a nada más que un centímetro del pin de caída y fue un ngobe.

Cómo me hubiera gustado ver entre los asistentes, no solo a profesionales de Mi Ambiente, que nunca han tocado una motosierra, sino estudiantes del INADEH o la Regional Universitaria que cursaran una capacitación en el uso y manejo de la motosierra y derribo de árboles.  Esto es tan necesario, como los cursitos de contabilidad que brinda la Regional.

Esto evitaría en cierta forma la piratería que siempre se da entre empresas por el personal calificado.

Me sorprendió gratamente la destreza y habilidad que han desarrollado los indígenas, no solo para operar la motosierra, sino equipo motorizado especializado para las labores forestales y escuché que el resto de los obreros les hacen bromas llamándoles “choecos” (cholos que se creen suecos).

Este es el segundo Darién; el que actualmente está generando riqueza para la provincia y el país, mientras el primero expulsa personal por falta de alternativas económicas y siguen llegando piratas y corsarios nacionales y extranjeros a destruir lo poco que queda de bosque y a depredar y robar las áreas protegidas.

El primer Darién se puede rescatar y la actual Ley de incentivos lo permite, pero hay que invertir, cuidar y esperar… como en el segundo Darién y volveremos a ver los profundos bosques y los caudalosos ríos y quizás para entonces, los motosierristas habrán desarrollado habilidades y destrezas para derriba científica y ya no veré  al amigo Junito de Yaviza, saltar como zarceta sobre trozas de una balsa, en un Chucunaque desbordado, pero bajando riqueza forestal bien trabajada y Yaviza se alegrará de nuevo.