Llegaron los Mangos


Como consecuencia del cambio climático, el clima se ha vuelto loco y ha provocado que los ritmos naturales de las plantas se hayan visto alterados y resulta aventurado seguir los viejos patrones de que tal planta o árbol florece en tal fecha o tal fruta se da en tal época. Como el tango “cambalache”, hasta la naturaleza está revuelta.
A finales del mes de febrero o principio del mes de marzo, me sorprendió mucho que en Cabuya ya hubieran algunos árboles de mango con frutos maduros, mientras otros no tenían ni siquiera flor o tenían los frutos muy pequeñitos.


Ya les conté en otra ocasión, que Cabuya es un corregimiento que se puede jactar de contar (hasta hace 5 años) con 38 variedades de mangos y sobresaliendo entre todas, el emblemático “mango calidad rojo”; con árboles centenarios entre los que se cuenta uno donde Victoriano Lorenzo se sentaba a reunirse con sus huestes.
Volviendo al tema que deseo compartirles, es que a raíz de esta producción anticipada me dio por comparar entre dos frutas, una nativa como el aguacate (Persea americana) y una exótica como el mango.(Manguifera indica)Sin temor a equivocarme, puedo asegurarles que uno podría venirse desde Puerto Obaldía, hasta Puerto Armuelles, comiendo aguacate y difícilmente repetiría una o dos frutas, ya que todas serían diferentes, por lo de la “variabilidad genética” ya que por ser nativas, tienen una amplia base genética que el hombre es el que reduce a través de procesos de mejoramiento.
No obstante esta amplia variabilidad, yo creo conocer no más de cinco o seis nombres de aguacate entre los nativos, ya que los productos de mejoramiento si tienen nombres y por lo general son introducidos al país, pero los nativos los conocemos como de mantequilla, de leche, cuello largo y otros poquitos.
Cuando vamos a los mangos, que es una fruta que llegó a Panamá desde la India, pero se diseminó a lo largo del territorio como si fuera nativo, no sabría yo decir con cuántos nombres vulgares (no científicos, comunes) se conocen las variedades existentes. Algunas variedades tienen hasta cinco nombres distintos según el lugar donde lo han sembrado.


Panamá a pesar de su extensión territorial, está entre los países de américa con mayor “diversidad varietal” de mangos y así también con la mayor cantidad de nombres vulgares y cuando me refiero a nombre vulgar, también me refiero a que somos prosaicos al ponerle nombre a los mangos.
A continuación les anoto una pequeña lista de nombres de los que en este instante me llegan a la memoria.
Entre los nombres comunes más frecuentes sobresales: el calidad, papayo, piro, canela, piña, de agua, minina, machete, hilacho, pico de pájaro; pero de allí saltamos a mango “guevo de toro”, “guevo de burro”, “guevo de puerco”, cuero de vaca, cachete de chola, cachete de gringo, tapa culo, tetita, teta de chomba, teta de vieja… por allí siga usted anotando, que de seguro cada uno de ustedes tienen como cinco nombres adicionales, igual de prosaicos como los anotados arriba.
Lo cierto es que en Cabuya ya empezaron a madurar y debido a los aguaceros irregulares que han caído, se augura la presencia de gusanos en mucha fruta, pero con la afluencia de capitalinos en Semana Santa, acostumbrados a pagar hasta B/.2.00 por un mango Tomy importado, uno que otro gusano no les causará ningún trauma y como ahora la costumbre es comerse el mango verde, ni cuenta se darán.
Disfrutemos del mango, cualquiera que sea su nombre, que es una fruta muy versátil y con magníficas cualidades alimenticias.

Tiempo de Revellines

 

“Ya estamos en Semana Santa y la naturaleza lo sabe”; parecieran decir todos los eventos naturales que se dan y que pasan inadvertidos para muchos, pero no para los que como yo, crecieron en el campo.

Hay uno muy especial que hoy quiero compartir con ustedes.  El fin de semana, buscando algo de fresco para aliviar un poco los grandes calores del mes de marzo, me fui a pasar un rato en La Laguna de San Carlos.  Allí todo te invita a tirarte en el llano y dejarte envolver de ese encanto lúdico que forma la brisa fresca, el paisaje agreste que incluye la laguna y la montaña, así como el silencio.

Resulta que el silencio no era total, ya que lo rompía una estridente serenata interpretada por miles de “revellines”, revelines, cigarras totorrón o como usted lo llama.

Sentía además un “bahareque”  o bajareque (llovizna) que en pleno mediodía y con sol radiante, caía.  Pero tampoco era lluvia, resultó que bajo el árbol que estábamos acostados estaban situados los insectos ya mencionados y todos cantaban y a la vez “orinaban”.  Ese era el bajareque.

Los dos compañeros y yo empezamos a comentar lo que acabábamos de descubrir; un árbol cubierto de revellines cantando y orinando.

Lo sorprendente vino después.  Un niño que nos escuchaba se unió a la tertulia y nos dice:” es que esos bichos salen del agua”.  Al principio no creíamos, pero al fijarnos en el espejo de agua de pronto, del fondo emergía una cigarra y aleteaba hasta secar las alas y levantaba el vuelo rumbo al árbol más cercano y se posaba en el, iniciaba su serenata para poner en funcionamiento sus órganos, a la vez que  expulsaba el exceso de agua y endurecía su exoesqueleto.

La conversación se tornó muy interesante entre el niño y mi persona, ya que empezó a cuestionar y yo a responder todas las interrogantes que él tenía.

Por qué salen del agua? Le contesté: según la teoría científica, todos los seres vivos salimos del mar o cuerpo de agua y así en proceso que duraron millones de años las aletas se transformaron en patas y manos, las escamas en plumas, pelos, espinas, conchas, etc.

Pero por qué si ellos vuelan salen del agua?  Todos los seres vivos necesitamos un mar o agua para nacer; y para eso la naturaleza nos da nuestro propio mar, llámese placenta, huevo o crisálida y los que no buscan un cuerpo de agua como esos insectos.  Luego empezó una larga lista de animales para determinar cuál era el cuerpo acuoso en que crecían en su etapa prenatal.

Lo que más me sorprendió fue que un niño en una tarde de paseo se entretuviera por un buen rato, hablando de ciencias naturales y solo suspendió la conversación porque lo llamaron, pero él se sentía cómodo con la conversación.  Al alejarse le comentaba a los compañeros, ojalá que el chico no se vaya más confundido, pero casi que seguro estaba de que un joven con ese nivel de interés, buscará nuevas respuestas a las interrogantes que puedan surgirle.

Pasado ese interesante incidente, me nacieron un poco las ganas de filosofar y pensaba en lo efímero que es la vida de una cigarra y ha sido el tema de planteamientos que van desde las fábulas de Esopo, hasta aquella canción mejicana que concluía “yo quiero morir cantando como mueren las cigarras”.

En su libro El Rubaiyat, Omar Kayan nos dice: Al brillar un relámpago nacemos y aún dura su fulgor cuando morimos; Tan corto es el vivir.  Entonces, concluyo en esta fresca tarde de marzo, recomendándoles que sean felices, hagan lo correcto sin preocupaciones e igual que las cigarras canten hasta el final y que tu canto sea el anuncio de que vendrán épocas mejores como lo anuncia la cigarra.

Tan Claro como el Agua

 

Y se acabaron los carnavales.

Parece que fue ayer cuando los seudo noticiero dejaban de lado los problemas de corrupción, los circos de la Asamblea y los cotidianos tranques, para dar paso a un tema más importante: En cuáles ríos se autorizaba sacar agua para “los culecos” y cuales carros cisternas estaban autorizados para las mojaderas.

A todo esto, autoridades y juntas de carnaval de Las Tablas, protestaban porque el río La Villa les quedaba muy lejos y ellos preferían tomar agua de pozos subterráneos cercanos (aún no hay un estudio que indique cuánta agua contienen los acuíferos de Azuero); mientras en Panamá Norte una comunidad serraba las calles porque tenían 3 semanas sin agua y acusaban a alguno de cerrar las llaves de paso; pero los carnavales ya estaban a la vuelta de la esquina y las decisiones había que tomarlas rápido.

Mientras esto ocurría en un minúsculo país llamado Panamá, al otro lado del mundo, en el continente africano, las autoridades de Suráfrica anunciaban en Ciudad del Cabo, con toda la gravedad que el caso amerita, que debido a una sequía que ya lleva tres años y que sus acuíferos están secos además de que Mozambique ya no les venderá más agua, solo tienen agua hasta el 12 de abril.  Esto hace que las ya estrictas restricciones sean aumentadas a niveles de crisis, tales como: los 50 lts. por persona por día se reduzcan a 25 lts. asi que la ducha diaria debe reducirse a 90 segundos, solo se permite lavar dos veces a la semana y tanto el agua de la ducha, como la de lavar, debe ser reciclada para utilizar en los inodoros; la cabeza solo se puede lavar una vez a la semana y no se permite regar jardines, a la vez que tu cuota de agua la compartes con tu mascota.

Estamos hablando de una real crisis y cerrar calles o avenidas no es una opción.

Se podrían imaginar ustedes lo que representan tres años sin que caiga ni una gota de lluvia?

Yo creo que no; porque en la mente del panameño lo que está fijado es que el agua debe estar presente y de manera gratuita en todos los lugares del territorio donde se mueva, incluyendo para botarla en carnavales.

Aquí, el agua debe acompañar al hombre hacia donde se dirija.  En Africa todos los animales, incluyendo al hombre, deben emigrar a donde el agua se dirija.

La tribu de los Masai en Kenia y Tansania han sido ganaderos por miles de años y por miles de años han sido nómadas, viajando con su ganado adonde va el agua y los pastos, y detrás de ellos va el resto de los animales.

Nuestra “civilización” aprendió a ser sedentaria y se inició con la agricultura, pero igual, cerca de las fuentes de agua.

Hoy día el agua es la columna vertebral del comercio mundial y dependemos de ella para la mayoría de las actividades humanas.  Es un recurso natural renovable, pero no siempre disponible.

Al comentar la crisis de Suráfrica, alguien me decía que “ese es un país muy rico y ellos pueden des-salinizar agua de mar”.  Eso puede que sea cierto, pero cuántas plantas y de qué tamaño requerirán para abastecer a todo ese país tan grande, ya que no estamos hablando de la Isla de Taboga o las islas caribeñas como Curazao.

El agua para consumo humano cada vez es más escaza y nos impone la obligación de conservarla y hacer un uso racional de ese recurso o correremos la misma suerte que ciudad del Cabo y no valdrán cierres de calles ni promesas de un Presidente.

Panamá se supone que tiene agua dulce en abundancia, pero despilfarramos tanto este recurso y hacemos tan poco para conservarla, que más pronto que tarde tendremos problemas de abastecimiento y como siempre le echaremos la culpa a un tercero y exigiremos al gobierno que nos resuelva el problema “para ya”.

La institución encargada de administrar el agua la hemos politizado tanto, que se ha convertido en un gran elefante cargado de burocracia, que le es imposible dar un paso hacia adelante, ni siquiera aún para resolver el problema de la pérdida de agua potable que casi alcanza a la mitad de la cantidad en pérdidas por agua no facturada y así aspira a administrar el agua a nivel nacional.

Hay un punto muy interesante que poco se menciona: quien le dio impulso a los acueductos rurales y a los huertos comunales en Panamá fue el Dr. Roderick Esquivel, ya que era un convencido de que la salud entraba por la boca y fueron muchos los acueductos que se establecieron por y con el patrocinio del Ministerio de Salud de ese entonces.

Trabajando en Colón fueron muchos los que establecimos de la mano de la Dra. Edith de Bethancour, que era una mujer incansable trabajando con las comunidades.

El proyecto se masificó y son muchos los acueductos rurales que hoy día se auto administran y son un ejemplo para el IDAAN; otros como todo, han sido foco de corrupción y clientelismo y han requerido de la intervención de las autoridades.

Pero con todas las críticas que se puedan hacer, el modelo es funcional y es el inicio de lo que se puede lograr cuando las comunidades se empoderan de los proyectos.

Esto es parte de los objetivos de la descentralización y es necesario que marchemos hacia allá, como guardianes de nuestros propios recursos naturales tan importantes como lo es el agua.

Que Malestar es la Goma

 

Cuando ya pasan fiestas tan notorias y alegres como el año nuevo y recuerda a lo lejos las buenas y grandes parrandas con las que celebramos esos días, recordamos además la resaca o goma que teníamos el día 2 de enero, lo menos que decimos es “un año nuevo, bien vale una goma”.

El problema es que ya están encima los carnavales y en esta fiesta también “hay que parrandear” y el miércoles de ceniza vuelve “la goma”, pero nos preguntamos muchas veces: “qué es la goma?”.

Por lo menos yo he preguntado a diferentes médicos y cada uno tiene unos síntomas y una definición y parodiando el refrán “El que la sufre es el que la avive”, asi que no se vale teóricos hablando o explicando dolencias que nunca han tenido.

Yo que la sufrí por muchos años si que la viví (en mis años de bebedor) en carne propia y me atrevo a manifestar que no es uno, ni dos síntomas.  Es un conjunto de dolencias físicas, mentales y emotivas.  Entonces no me diga que es una descompensación de azúcar, prioritariamente; son muchas otras cosas.

Los médicos la conocen como kreisalgia (kreis= intranquilidad, algia= dolor) y la definición técnica es la manifestación de modificaciones metabólicas y endocrinas, que motivan reacciones en el sistema de  defensa del cuerpo. Según el asesor médico del Tiempo de Bogotá, la cantidad de sustancias que se producen cuando uno está borracho, desencadenan un proceso de inflamación diversa que obliga al cuerpo a protegerse; en la sangre se eleva la vasopresina, la aldosterona y la renina, pero esto aumenta la acidez y complica la oxigenación.  Para que las células no sufran, el organismo echa mano de otros recursos, que a su vez desprenden productos que provocan otros males que complican más las cosas.

Resumiendo toda esta perorata se transforma en un malestar que se expresa en una ansiedad, náuseas, boca seca, mareos y un sentimiento de culpa que martilla tenazmente, acompañado de un dolor de cabeza que se dispersa por todo el cuerpo.  Si a esto se suma un mal genio que crece con los ruidos o los regaños de alguien en tu entorno y unas ganas irresistibles de desaparecer y que obliga a implorar por un milagro que nos saque de esa agonía, mientras se promete con firmeza alejarse para siempre del alcohol.  No es una molestia pasajera, es para toda la vida; es “goma”.

Si resulta como decía una propaganda: “comiste y bebiste Demetrio” y te atiburraste de todo lo que pudiste y se añade un malestar estomacal, ni te lo cuento.

Cada goma es una agonía diferente y está ligada a cada persona y su metabolismo (algunos afortunados no les da goma), la cantidad y calidad del alcohol consumido.  Se ha demostrado que los licores destilados (secos, ron, vodka, whisky) producen gomas más tolerables que los fermentados (vinos, cervezas, chichas..

Igual que los tamales, remedios para aliviar los malestares de lo goma son muchísimos.  El primero de todos es “no tomar” pero entonces, de qué estamos hablando.  Algunos remedios que puedes utilizar son los siguientes:

Jugos de frutas: contienen azúcar para reponer la perdida.

Miel:  por lo mismo, pero solo en cucharadas.

Agua: el alcohol deshidrata.  Hay que reponer el agua perdida y además para tener en el estómago algo  

 En caso de vomitar.

Caldo sin grasa:  aunque sea china son buenas para reponer el agua y el sodio.

Complejo B: en casos graves, este es puesto via intravenosa.  Caldo de carne o pescados y cereales pueden ayudar.

Café: el alcohol dilata los vasos sanguíneos y produce dolor de cabeza.  El café los cierra y alivia el dolor.

Analgésicos: si no hay gastritis, una partilla es suficiente.  A mí me servían aquellos analgésicos que contenían cafeína.

Dormir: Esto lo saben bien los bebedores y es lo que se trata de hacer aunque sea bastante difícil.

 

Este mal es tan viejo como las bebidas alcohólicas asi que se remontan a los primeros tiempo de la humanidad y desde entonces se han fabricado mitos y leyendas sobre cómo evitar la goma o resaca, pero al fin y al cabo mitos y de seguro usted tendrá otros, tales como: comer antes lo disminuye, los antiácidos lo curan, agua y leche lo evita, otro trago lo mejora, mezclar bebidas es peor, comer queso amarillo lo evita y por allí siga anotando; ahora si alguno le funciona, bienvenido sea, pero no acepte recetas de nadie que no sea bebedor, porque esa gente lo que quiere es dañar el evento.

Los carnavales están ya muy cerca, prepárese y recuerde que esta es una festividad que precede a la cuaresma, que es una etapa de recogimiento y sacrificio y qué mejor inicio que una magistral goma el miércoles de ceniza, aunque se le olvide el domingo que ese día prometió no volver a beber alcoh

Cuán Dañino es el Bulo

Bulo: Noticia falsa propalada con algún fin.

Empiezo con la definición de ese término porque confieso que desconocía el significado y lo busqué en un “instruye burro” (diccionario) al leer un artículo publicado en la prensa y con el que estoy muy de acuerdo.  Y me agradó tanto, porque desde hace años discuto sobre este tema que hoy comparto con Uds..

Se trata del nombre Arraiján y la etimología de esa palabra. De un tiempo para aca escuché como absurda, la historia y que caía de su propio peso, de que se desprendía del termino” At right hangs” ya que Arraiján se llama así mucho antes de que los gringos llegaran por aquí.

Aparte del nombre del cacique Arrayán que se menciona y sustenta el columnista y que tiene mucho más lógica y peso que la charlatanería pseudo histórica que pretenden acuñar de un tiempo para acá.

Por otro lado, en un escrito colombiano leí otra versión que también tiene más lógica.  Los colombianos estaban aquí antes que los gringos o no? Y en el Pacífico cercano a la ciudad de Panamá, todo era manglar y pantanos (no había canal) y para ese sector existían atracaderos de lanchas cerca de unos árboles, parecidos a los que en Colombia se conocían como arrayán y ese era el lugar de los “arrayanes”.  No les suena más lógico?

Tanto la versión del artículo, como la que acabo de anotar, o la mezcla de ambas, tiene más base científica y documentación, que el bulo que siguen esparciendo, incluso los comunicadores de medios.

 

Se imaginan que hasta a la historiadora Diana Uribe le metieron este y otros bulos similares.

Existe otro bulo de origen veraguense que me suena un poco a “chiste”, pero  bulo al fin.

Hace unas semanas en Facebook salió un señor explicando sobre las frutas del árbol de esparvé y eso estuvo bien hasta allí.  Lo malo fue lo que explicó después.  Decía el señor, que el nombre espavé se lo pusieron los indios porque estos árboles los usaban por su altura, para desde allí vigilar cuando venían los españoles y por eso el árbol “es pa ve”.

 

La misma historia se la decía una colega (veraguense) a campesinos en Darién, cosa que me obligó a pararlo y llamar la atención, pues sentía que era primero por respeto a mí y luego por respeto a toda la audiencia y le digo: Lo lamento colega, pero eso último que dijo no lo repita, porque no es cierto.  Según esa historia, cuando los españoles llegaron por Veraguas, los indios ya hablaban español, incluso con modismo de decir pa’ por para y vé por ver.  Además, en Costa Rica el árbol se llama espavel y en Nicaragua se llama Aspavel, que historia tiene para allá?

Si vamos a las comunidades indígenas, cada etnia le mete una clase de goles a los turistas.  Fíjense ustedes que a mi hijo le dijeron en la Comarca Guna Yala (este nombre también es motivo de discusión con los kunas de Colombia) que el nombre Anayansi resultó del sincretismo de la palabra anai (amigo) y an si (siéntese).  Pero resulta que los kunas no estaban en Panamá cuando llegó Balboa.  Desde el río Chame hasta el Darién y las islas, lo poblaban los Cuevas.  Los kunas llegaron 100 años después a lo que hoy día es San Blas.

Si vemos a los emberá, también tienen lo suyo porque acuñar la historia de que emberá 2.60 se  debe al dinero que tenía su primer cacique, que se ahogó en el río Chagres, cuando 2.60 es la cota o elevación donde se establece esa comunidad cuando se traslada de la represa Bayano.  A cuántos nacionales y extranjeros los habrán montado en “esas piraguas y los han paseado”?

Aunque parezca chistoso, el bulo tiende a desdibujarnos como Nación, ya que afecta o lesiona nuestra identidad como pueblo entonces debemos ser cuidadosos  en aceptar y repetir cualquier cuento que le digan aunque sean comunicadores sociales..

Otra Vez el Cannabis

 

Hace ya algunos meses compartí con ustedes un poco de la historia del cáñamo (cannabis); desde cuando el hombre utilizó este recurso y por qué fue prohibido, haciendo uso incluso de organismos internacionales como la naciente  Naciones Unidas.

El motor que movió todo este movimiento se llamó “industrialización” con la invención de la imprenta y el descubrimiento del petróleo.  De quien se valieron?  De la naciente industria petroquímica y de medicamentos, la industria minera y la papelera.  Quiénes llevaron la voz cantante?  Los industriales mineros sur africanos, los industriales petroquímicos de Estados Unidos, la naciente industria papelera europea y una facción de la iglesia evangélica con ansias de poder.  Esto con más detalles lo planteamos en ese anterior artículo.

Hoy día resulta que muchos países, incluyendo los arriba mencionados que satanizaron el canabis; ahora lo permiten para uso medicinal y en Panamá se acaba de presentar un ante proyecto en la Asamblea, para su discusión.  El canabis siempre se utilizó con fines medicinales para muchas dolencias, sobre todo el asma, se compraba en las farmacias y fue en Estados Unidos y demás países desarrollados donde se inició el uso del cannabis con fines psicotrópicos.

LA INDUSTRIALIZACIÓN O LA SEGUNDA OLA COMO LA LLAMA Toffler, empujó con mucha fuerza el crecimiento en el mundo, pero trajo con ello niveles tan altos de iniquidad e injusticia, que la brecha entre los que tenían recursos y los que no tenían nada se hizo abismal; pero también trajo productos y subproductos que potenciaron enfermedades nunca antes vistas y niveles de contaminación del medio ambiente, que están afectando la salud de la humanidad y el planeta.

 

En estos momentos el mundo en buena parte está ya adentro o empieza a adentrarse en la tercera ola y los paradigmas ya están cambiando.  Lo que antes era signo de progreso, ahora es perjudicial y nocivo.

Esta situación está enfrentando nuevamente a las fuerzas del atraso (que pretenden seguir en la segunda ola) con las fuerzas de avanzadas que exigen pasar a otro modelo de desarrollo) y si no fíjense nada más los acuerdos de Kioto y luego la reunión de París.

Mientras tanto, día a día las sociedades regresan a  actividades y procesos olvidados o prohibidos, dejando atrás la filosofía epicureista que dio vida a la segunda ola: “De dos placeres el mayor, de dos dolores el menor” para quien generara una industria.

Cuando publicamos el artículo sobre el cáñamo, cuya intención era sobre todo resaltar quiénes y por qué se satanizó una fibra que le daba tantos beneficios a la humanidad, algunos de los lectores insinuaron que yo estaba haciendo apología de una sustancia prohibida y que causaba tanto daño a la sociedad.

Bueno, que le pregunten a los enfermos de asma, esclerosis o epilepsia,¿ qué tanto daño les produce el cannabis?.  Yo me refiero a cannabis y no a mariguana o marihuana ya que este término se acuñó en norte américa para indicar la droga ilícita, mientras que la medicinal sigue siendo cannabis como es el nombre del cáñamo y no es la hoja simplemente, sino que lleva un proceso farmacéutico previo y esta comprobado que alivia muchas dolencias..

Ojalá y los que deseen discutir el anteproyecto de Ley cuando llegue el momento, se tomen el trabajo de leer, instruirse y luego hablar con propiedad.  Si no hace esto, entonces como dice Enrique Rodó: Sea un buen espectador allí donde no pueda ser actor.

Valorando la Vegetación

Si viajamos por la carretera hacia Darién o pretendemos llegar a Tortí que es la comunidad más oriental de la provincia de Panamá, vamos a encontrar la comunidad de Guacuco.

El paisaje que resalta aparte del caserío existente se puede describir de la siguiente manera:  A mano izquierda una gran planicie con suelos bastante fértiles, que se extienden hasta tocar con el río Chucunaque o algunos de sus afluentes y a la mano derecha, la misma planicie aunque más corta y sobre todo, menos ancha, ya que colinda con una pequeña cordillera que corre paralela a la carretera.  De esta pequeña cordillera deseo conversarles.

La primera parte está completamente deforestada ya que al igual que la planicie, fue desmontada y sembrada de pasto, lo que fue parte del “progreso” que traería la construcción de la carretera.  La otra parte permanece con bosque secundario y sobresale el verdor de la floresta y las nubes que allí se posan al condensarse el agua que se evapora.

En esta pequeña cordillera existen los nacimientos de las únicas fuentes de agua del lugar, que dicho sea de paso, son muy escasas.

Es aquí en una parte del área boscosa donde se encuentran la toma de agua de un acueducto rural que abastece a gran parte de la comunidad, la otra parte está en la zona de corredor de conservación de las plantaciones de la empresa Ecotopía.

En verano la parte deforestada arde al punto de que el humo impide el paso de los vehículos por la carretera, pese a todas las prohibiciones que se le ocurra poner a Mi Ambiente.

Al iniciar la temporada de lluvias del presente año, me solicitaron realizar una valoración ambiental de la parte boscosa y para ello se establecieron unas parcelas de medición y evaluación, parecidas a las que se establecen en los inventarios forestales.

Lo interesante de este ejercicio fue que la parcela más pequeña donde se cuenta y mide toda la regeneración de plantas del año, con diámetros menores a una pulgada, no había nada; pero los árboles que caían en este rango, todos tenían alturas mayores a 5 metros y todos eran especies de maderas duras.

La explicación es sencilla; la regeneración es muy escasa porque la luz solar ya no entra o entra muy poco hasta el suelo, aparte de que el suelo tiene una buena capa de hojarascas en proceso de descomposición y los arbolitos que se encuentran, son de cinco a más años y están creciendo para buscar la luz solar y serán los árboles de primer dosel y las maderas finas del futuro.

Dos aspectos interesantes que notamos fueron:Primero, las fuentes de agua o riachuelos, pese a que el invierno ya había empezado, el agua corría y se mantenía cristalina o sea que el suelo no se arrastraba con las lluvias, porque había buena cobertura.  Otra cosa fue que se escucharon cerca el aullido de los monos, signo de que la fauna retornó al área y no solo monos, sino que encontramos un ave familia del quetzal y cuyo avistamiento es muy difícil y allí la vimos en su nido a escasos 5 metros de distancia; la fotografiamos y no se espantó.

Esta reserva puede tener entre 25 y 30 años que no se tala y miren el estado de resiliencia en que se encuentra.  Yo le pedía a la Universidad Regional, que se desarrollaran investigaciones para medir por lo menos, el caudal de las quebradas en esta parte y en la parte deforestada que incluso se secan en el verano y en los años de fenómeno del niño la situación es realmente crítica.

Espero que con la nueva Ley de Incentivos a la Conservación Forestal, la investigación tome más importancia que ahora, no solo por la propia Universidad, sino por el propio país que lo está reclamando. Pareciera que la ciencia paso a un lugar secundario hasta en la universidad.

¡Que Tamal!

Un País de Plástico

By Blas Moran

 

 

Qué difícil resulta para el hombre, hacerse una autocrítica y más difícil todavía producto de ella, tener que cambiar actividades, si ésta altera su modus vivendi.

Si se encuentra que nuestra actividad ha traído consecuencias que pueden ser consideradas como negativas o por lo menos perjudiciales en alguna medida, estamos prestos a “tercerizar” la responsabilidad.  O sea, la culpa no es mía, es de cualquier otro.

Esto ocurrió con el proyecto de Ley aprobado para eliminar gradualmente las bolsas de polietileno en tiendas y almacenes.

De todos es sabido, los numerosos problemas que este producto, que inicialmente se pensó que mejoraría la vida, le ha traído a la familia, a la comunidad, al país y al mundo.  Esto es innegable. Qué ocurrió? Que de una vez salió el “Santo Oficio” del comercio panameño (Cámara de Comercio, APEDE, SIP, etc.) y concluían que el problema no es el plástico sino la falta de educación del que recibe los envases y por eso terminan arrojándolo a los ríos y van a los mares.  Eliminar ese producto atentaría contra la industria nacional y para reducirlo requieren de un tiempo prudencial (casi infinito) para que los inversionistas se acomoden. Casi es el mismo cuento de los diablos rojos, de los bien cuidaos, de las invasiones y sigue un largo etc.

Lo cierto es que estamos asfixiándonos en basura y que no solo nos asfixiamos nosotros, sino que contaminamos las fuentes de agua, los mares y también asfixiamos a los animales de monte y mar.

Cuando no había plástico, las señoras iban al mercado con su canasta tejida por nuestros artesanos o con bolsas cosidas por ellas y les aseguro que los ríos no estaban como están ahora.  Todavía yo sé envolver en papel amarillo desde una libra de azúcar hasta 10 centavos de pimienta aprendido en la tienda que teníamos en Cabuya.

Las comparaciones siempre son odiosas pero yo recuerdo que en los tiempos de La Unión Soviética no existía el plástico aparte de las limitaciones suntuarias que tenían, pero casi en su totalidad hombres y mujeres tenían en su bolsillo una bolsa que sacaban para guardar cualquier cosa que tuvieran que llevar a casa y Moscú era una ciudad de millones de habitantes.

Es cierto que el plástico mejoró la apariencia del producto y facilitó su comercialización, pero ha causado muchos daños ambientales y de salud. Han visto ustedes como quedan nuestras calles después de los desfiles, carnavales y pronto Navidad?  Entonces hay que hacer un alto y regresar a  caminos más sustentables y de seguro que no será lo único; ya que en los años 80 el escritos Alvin Toffler anunciaba la vuelta atrás de muchas cosas y hábitos, algunas de las cuales son paradigmas de progreso y que tendrán que eliminarse y volver a formas ya archivadas; para muestra un botón:

1.        La energía nuclear (reactores) se regresa a fuentes de energía limpias.

2.       Las grandes fábricas con miles de obreros automatizados con alta concentración de capital y maximizar la producción en un punto, se regresa a la fabricas mas pequeñas pero con ubicación estratégica aunque queden distantes una de otras pero con menos mano de obra y mas automatización (Esto no lo ha entendido D.Trump).

3.       La producción masiva y propaganda para varias los hábitos alimenticios de poblaciones enteras, que después generan pandemias de enfermedades como la obesidad. Se está regresando a hábitos alimenticios antiguos mas saludables.

Tenemos que volver al papel o cualquier otro producto biodegradable, que los hay.

Sé que saldrán otros a plantear, que para producir papel hay que talar muchos árboles, pero recordemos que la madera no es la única fibra de la que se hace papel.  En otro escrito ya comentamos cuándo y por qué se sustituyó el cáñamo por la madera.  De pronto este es otro producto que debemos “des satanizar” y regresar a él y sustituir el método actual que consume toneladas de acido sulfúrico para fabricarlo pero que actualmente es monopolio de consorcios trasnacionales.

Por lo pronto los envases y bolsas de plástico han contribuido a ensuciar los mares, los ríos, las ciudades y los pueblos del campo y han hecho retroceder en la mente del ciudadano la ya reducida conciencia de limpieza y urbanidad que tenía; luego entonces, deben ser eliminadas gradualmente como ya ocurrió y está ocurriendo en muchos otros países.

«Lo cierto es que estamos asfixiándonos en basura y que no solo nos asfixiamos nosotros, sino que contaminamos las fuentes de agua, los mares y también asfixiamos a los animales de monte y mar.«

Panamá Puente del Mundo

 

En el mes de la Patria, aprovechando uno de los largos fines de semana, me quedé en la ciudad y le pedí a mis hijos que me llevaran a conocer el Museo de la Biodiversidad.  Debo confesar que a estas alturas no lo conocía, como tampoco conocía el nuevo paseo de Amador.

Yo creo que sobre todo , los que algo tuvimos que ver con las luchas reivindicativas de nuestra soberanía y la recuperación de todo este territorio, tenemos el derecho y el deber de recorrer y disfrutar por lo menos una vez, de todo ese complejo turístico; y aunque al recobrarlo sintamos que hay fisuras por las que se destila corrupción y oscuras acciones, no es menos cierto que ahora todo ese territorio es nuestro, igual que la corrupción.

Bueno, ese es otro cuento que da para un artículo, solo ese tema.  Yo deseo compartir con ustedes mi impresión en el Museo de la Biodiversidad.

Sin lugar a dudas, tanto la estructura como la información que se presenta, está dirigida principalmente a los panameños. 

Hay que conocerla, interiorizarla y valorarla.  Yo salí de allí sintiéndome más panameño y más responsable con mi país y el mundo.  Casi que es obligatorio visitarlo con el tiempo suficiente.  No es una visita turística dentro de una agenda apretada de tiempo; es para contestarte las preguntas: de dónde venimos?  Qué somos? Y hacia dónde vamos?

Ya en escritos anteriores les había comentado que el istmo de Panamá emergió del mar y unió América del Norte con América del Sur y formó ese puente de vida que permitió que plantas y animales cruzaran en una y otra dirección.  Empezó así el gran corredor biológico que todavía hoy sigue siéndolo.

Este puente biológico facilitó la conexión terrestre, pero partió en dos lo que antes era un solo océano y las corrientes marinas fueron desviadas hacia otras direcciones, provocando con ello cambios mundiales tan extremos en el clima, que se produjo heladas en algunas partes y desiertos en  otras.

Así mismo la fauna marina empezó una era de adaptación a mares más fríos o más calientes y así ese pequeño puentes que es Panamá, tiene en el norte un mar más cálido y en el sur un océano más fresco.

Se imaginan ustedes que ese evento que ocurrió hace casi 4 millones de años, empezara a dar marcha atrás y que producto del calentamiento global los océanos suban de nivel y el puente vuelva a convertirse en varios islotes y lo que hoy son dos océanos vuelva a ser uno?  Esto igual que en un inicio, no será en un año, ni diez: será un proceso.  Pero en el interín se irán sucediendo cambios tan abruptos en el entorno, que nada volverá a ser igual.

Como coincidencia en la tarde después de visitar el museo, pasaban en el canal de National Geographic un documental con muchas entrevistas realizadas por Leonardo Di Caprio, a científicos, políticos, campesinos, indígenas y terminaba con su intervención en las Naciones Unidas.  Todo giraba sobre lo que ocurría ya en distintas partes del mundo, por efectos del cambio climático y las consecuencias futuras de no tomar las medidas necesarias en la actualidad.

Las grandes emisiones de CO2 a la atmósfera están alterando de tal forma la delgada capa que cubre la tierra, que ya no podrá protegernos como hasta ahora, de los rayos del sol; y no es que eso pasará; ya está pasando; ya hay comunidades indígenas enteras que han tenido que emigrar porque la isla donde vivían se inundó y desapareció.

Las economías más prósperas en el mundo, son también las que más contaminan y más CO2 envían a la atmósfera, por lo que se han puesto la meta de reducir las emisiones de CO2 pero resulta que el señor Donald Trump, no está convencido de los efectos del cambio climático (y él no es el único) por lo que anunció que retrasará su compromiso de reducción de emisiones.

El gran problema es que la tierra y su entorno tiene su propio calendario y no toma en cuenta quien está de acuerdo y quien no y se afectarán las áreas que se tienen que afectar, estén o no de acuerdo.

Algo tan insignificante como el istmo de Panamá, sale a flote y provoca el cambio del clima del mundo.  Sabemos con certeza lo que ocurrirá, si la temperatura en los polos aumenta un grado?  No se trata solamente de que se mueran los osos polares, los trópicos cambiarán irreversiblemente y la producción de alimentos se verá afectada y la hambruna aumentará por todas partes. Qué le tocará a las poblaciones afectadas?  No hay alternativas, hay que emigrar y para dónde? Ya ustedes lo están viendo.

No se trata de teorías “maltusianas” de posibles catástrofes.  Ya está ocurriendo; el cambio climático está entre nosotros y lo tenemos también en Panamá y todavía hay personas que o no se dan cuenta o creen que las medidas se pueden retrasar “mientras hago unos reales más”.  Eso lo dicen los inversionistas, comerciantes y promotores de bienes raíces, pero mientras, en invierno nos inundamos y en verano el sol nos cocina.

O empezamos ya a actuar con responsabilidad individual y colectiva o después puede ser muy tarde.  Durante esta semana se realiza en Bon, Alemania, otra reunión internacional sobre el tema y Filipinas resalta la carencia que existe en los países ya afectados como ellos, sobre los resultados de investigaciones que se han realizado y lo mismo ocurre en América. Tailandia reporta que los periodos monzonicos cada día son más impredecibles y con cada inundación y ya van tres se inunda 30% de Bangkok y las consecuencias son catastróficas para el comercio mundial

Yo soy un convencido de que los países con economías centralizadas, están en mejor condición de planificar e implementar medidas para frenar los efectos del cambio climático. 

No me refiero ni a comunismo, ni socialismo, ya que esto no es un problema político, sino un problema físico, técnico científico, congrves efectos económicos.

Esto podemos discutirlo posteriormente, pero mientras pensemos desde nuestro Panamá, cuál debe ser nuestro rol para contribuir desde lo local a  frenar un problema global.  Larga vida y éxitos al Museo de la Biodiversidad